LOS ÁNGELES (AFP)
Dos nuevos focos de incendios estallaron este lunes en California (oeste de Estados Unidos), donde impera el estado de emergencia a causa del fuego, que dejó un muerto, destruyó decenas de edificios y forzó la evacuación de decenas de miles de personas, siendo al menos uno de los incendios provocado.
Al menos uno de los incendios fue provocado, según las autoridades del Estado.
En el sur de California, cerca de la frontera con México y al norte de la frontera con México, miles de bomberos intentaban controlar las llamas de unos 10 incendios de gran amplitud, que han devastado al menos 25.000 hectáreas en total, según un cálculo de AFP.
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Se prevé que las temperaturas vuelvan a superar los 30 grados en la región, donde los bomberos luchan contra fuertes vientos que han provocado condiciones aún más peligrosas en esta parte de California donde ha habido solo algunos chubascos en los últimos seis meses.
Uno de los focos más impresionantes está localizado al este de San Diego, muy cerca de la frontera con México, que dejó el domingo un muerto y 17 heridos, entre ellos cuatro bomberos.
Este lunes por la mañana, este siniestro había arrasado con 8.000 hectáreas y amenazaba "cientos de estructuras", según un portavoz de la agencia californiana de lucha contra los incendios.
Más al norte, los 36.000 habitantes de la ciudad de Ramona, 50 kilómetros al noreste de San Diego fueron llamados a evacuar a causa de otro incendio que se unió a otro este lunes, cuando ambos reducían a cenizas una superficie de 4.000 hectáreas.
En el condado de Orange, entre San Diego y Los Ángeles, un incendio de 1.600 hectáreas se estaba produciendo cerca de la ciudad de Irvine. Las autoridades estimaron que éste se trataba de un incendio criminal, puesto que tres fogatas se encendieron al mismo tiempo.
"Lamento decir que se trata de un incendio criminal", declaró el jefe de los bomberos del condado, Chip Prather, tras precisar que uno de sus servicios lanzó una investigación.
Otros dos incendios se produjeron en el desierto al norte de Los Ángeles en una superficie total de 11.000 hectáres, donde tres personas resultaron heridas y cientos tuvieron que ser evacuadas.
El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, tuvo que decretar el domingo el estado de emergencia en el sur del Estado debido a los múltiples focos de incendio.
En Malibú, la ciudad de las estrellas de cine y empresarios millonarios a 30 kilómetros al oeste de Los Ángeles, otro incendio espectacular seguía este lunes devastando más de 1000 hectáreas y amenazaba a unas 400 casas en las colinas.
Unas 1.500 personas tuvieron que ser evacuadas de la zona el domingo. Entre las mansiones perjudicadas y mostradas por diversos vídeos en los medios figuran las del director de 'Titanic' James Cameron y de la actriz de 'Grease' Olivia Newton-John.
Siete edificios, entre ellos una mansión estimada en unos 17 millones de dólares que acababa de venderse, se redujo a cenizas en este siniestro que no ha dejado víctimas en esta zona y que aparentemente empezó tras la caída de un cable de alta tensión.
Las llamas atizadas por ráfagas de vientos de más de 110 km/h, bajaron incluso hasta la mítica ruta que bordea la costa del Pacífico entre Los Ángeles y San francisco, donde se tuvo que bloquear la circulación por la mañana.
Todo el sur de California está en estado de "alerta roja" debido a los fuertes vientos, las temperaturas y la sequía que persiste desde marzo.
lunes, 22 de octubre de 2007
California arde y al menos un incendio es de origen criminal
Etiquetas: Incendios
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