domingo, 28 de octubre de 2007

La nueva edad del carbón

George Monbiot / The Guardian
rebelion.org
Cuando observaba como la máquina extraía los primeros cubos de tierra, un pensamiento me golpeaba la cabeza. “Si permitimos que esto ocurra podríamos también pararlo ahora”. No tenía pinta: en ese momento una excavadora amarilla y un par de camiones se llevaba la tierra. Pero en un recinto seguro detrás de mi estaban las bestias más pesadas que nunca he visto, 1300 caballos o mas – alineados y preparados para comenzar a excavar una de las minas al aire libre más grandes de Europa. ¿En Rumania quizás? ¿En la república checa? En una colina en el sur de Gales. Las excavadoras de Ffos-y-fran, en suburbios de Merthyr Tydill, excavarán 1000 acres (1 acre equivale 0.405 hectáreas) de tierra a una profundidad de 600 pies (1 pie equivale 0.305 metros). Nunca ha habido un agujero como éste aquí, y las políticas sobre el cambio climático de nuestro gobierno van a caer en él.

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Todo en este proyecto es raro. El borde del agujero esta solo a 36 metros de las casas más cercanas, sin que haya habido compensación a los propietarios y sus preocupaciones hayan sido rechazadas por las autoridades. Aunque los habitantes han combatido el plan, su administración, el gobierno de Gales y el gobierno de Westminster han colaborado con los planificadores para forzarlo, usando métodos cuestionables. He encontrado evidencias que me sugieren que un miembro del gobierno de Tony Blair usó información falsa buscando persuadir a la administración galesa para aprobar la mina. Pero quizás el hecho más remarcable es este: Fuera de Merthyr Tydill casi nadie conoce lo que está ocurriendo.

Parece como si estuviéramos a punto de reentrar en la edad del carbón. Aunque las compañías eléctricas gastan millones diciéndonos que invierten en energías renovables, al menos cuatro de ellas- E.on, RWE npower, ScottsihPower y Scottish and Southern – están desarrollando planes para nuevos generadores térmicos con carbón, que producen casi dos veces las emisiones de carbón de los quemadores de gas. Según un documento del gobierno, hay “20 mil millones de libras para planes de construcción de nuevas estaciones térmicas de carbón en el reino Unido antes de 2020”. (1)

Las compañías energéticas están confiadas en que el gobierno les respaldará. Su Libro Blanco de la Energía publicado en Mayo, comienza explicando la necesidad de disminuir la economía del carbono. Pero enterrada en la página 112 hay un compromiso: “asegurar el futuro a largo plazo de la generación de energía con carbón”. (2)

Esto es justificado bajo la perspectiva de que una día las emisiones de carbono podrían ser capturadas y enterradas en formaciones geológicas; un proceso conocido como captura y almacenaje de carbono (CCS, siglas en inglés). Pero mientras el gobierno ha pedido a las compañías que construyan plantas de demostración para el 2014, no hay ninguna firma que tenga planes para esta aventura comercial. El Libro Blanco de la Energía admite que el “CCS no sería comercialmente viable si los costes no caen sustancialmente… a no ser que el precio del carbón crezca lo suficiente para provocar un mayor incentivo financiero “. (3) En un debate parlamentario en Mayo, Alastair Darling, entonces a cargo de la energía, reconoció que las tecnologías requeridas para CCS “podrían no estar nunca disponibles” (4). Podríamos estar atrapados con una nueva generación de centrales térmicas, aprobadas sobre la base de una promesa que nunca se materializaría y que nos compromete a enormes emisiones durante 40 años.

Hay otra política enterrada en el Libro Blanco que ya se está implementando. Esta es “maximizar la recuperación económica… de las reservas de carbón que quedan.” (5) En 2006, los concejales ingleses de planificación consideraron 12 solicitudes para nuevas minas de carbón al aire libre. Rechazaron dos y aprobaron (9). Han hecho eso, lo muestra la historia de Ffos-y-fran, con el apoyo activo del gobierno.

Al principio, la población de Merthyr Tydfil no podía entender como sus representantes se ponían al lado de los empresarios. Merthyr tiene una larga tradicional laborista de solidaridad social. Mientras que mucha gente lamenta la muerte de las minas profundas, las abiertas al aire libre son impopulares. Peticiones de firmas circularon por un grupo local de activistas que consiguieron 10.000 firmas. Pero la administración local, que está dominada por el partido laborista, miembros de la asamblea laborista y la asamblea galesa han ayudado todos a que la compañía minera combata a los objetores. Hay 432 municipios en el Reino Unido. La esperanza de vida en Merthyr ocupa la posición 429 (7). Esto es el resultado de la industria pesada, el hábito de fumar y la mala dieta, tiene las tasas más altas de enfermedades con obstrucciones pulmonares (bronquitis o enfisema), accidentes cardio-cerebrales y otros problemas de corazón (8). Todas estas enfermedades se incrementarán por la contaminación del aire y el estrés. La mina será excavada en una empinada colina amenazando al pueblo.

Para alcanzar los 10.8 millones de toneladas de carbón que esperan extraer, los extractores tienen que remover 123 millones cúbicos de rocas (9). La excavación y la extracción durarán 17 años, con explosivos usados para machacar la piedra y máquinas trabajando de 7 de la mañana a 11 de la noche, generando humo y polvo (10). Mientras que la Organización Mundial de la salud identifica los 55 decibelios como causantes de “serias molestias” (11), las condiciones planificadas marcan los máximos niveles de ruido a 70 dB (12). Cuando los habitantes del pueblo dicen que el proyecto arruinará sus vidas, no creo que estén exagerando.

Pero no son los únicos que se verán afectados. Una tonelada de carbón contiene 746 kg de carbón (13): al quemarlo produce 2.7 toneladas de dióxido de carbono (14). Esto quiere decir que el carbón en Ffos-y-fran será responsable de al menos 30 millones de toneladas de dióxido de carbono: equivalente a las emisiones anuales sostenibles de 25 millones de personas (15). El único medio cierto de prevenir el cambio climático es dejar los combustibles fósiles en dejar los combustibles fósiles en la tierra: cuando son extraídos, son usados. Este punto ha sido ignorado por el gobierno. Ha concentrado todos sus esfuerzos en reducir la demanda de combustibles fósiles, pero no ha hecho nada para reducir el suministro. Todavía subsidia la exploración de petróleo y gas y ha dado una lluvia de dinero estatal en la industria minera.

Millar Argent, el consorcio que está excavando el pozo, llama a Ffosy- fran un “proyecto de recuperación de tierras”. Extrayendo el carbón, la compañía dice, que recuperará el terreno sin necesidad de dinero público. El proyecto también dará “empleo directo para 200 personas” y “generará decenas de millones de libras para la economía local y para el beneficio de la comunidad local.” (17) No hay duda de que la zona del proyecto, comprendiendo viejos trabajos y montones de escombros, es insegura. Pero la población reclama que solo una pequeña parte del lugar está visiblemente abandonada. Como pude ver, la gran parte consiste en monte bajo y pastos, en la que las ovejas pastan y la gente de Merthyr anda y acampa. “La reparación sería sensata para reparar alguno de sus peores problemas,” me dijo una persona contraria al proyecto, Leon Stanfield. “Pero no hundes el terreno 600 pies y barrenas cinco días a la semana para recuperar un área.” Hoy, dice, la mayoría de las minas abiertas al cielo abierto son promovidas como proyectos de recuperación para intentar ganar la aprobación pública. Calcula que la recuperación sin la mina de carbón de Ffos-y-fran necesitaría de tres años. Como Merthyr Tydfil cumple la financiación European Objective One (18), la limpieza podría ser apoyada por la Unión Europea. Los contrarios al proyecto mantienen que pocos de los beneficios prometidos llegarán al pueblo. Los trabajadores que operan la gran maquinaría usada en la apertura son especialistas que tienden a moverse de mina en mina. La mina, creen los habitantes del pueblo, destruirá la zona, desanimando a los empresarios a mudarse aquí y se llevarán a otra parte a los turistas. Uno de los activistas, Ferry Evans, me llevo a la colina y apunto hacia su bungalow – al otro lado de la carretera, a unos 36 metros.

En 1997, la Oficina Galesa planeaba publicar un nota técnica de aviso, asentando las condiciones que las nuevas minas tendrían que cumplir. Nada ocurrió hasta que el gobierno de la Asamblea Galesa se formó. Prometió publicar la guía en 2003 (20), pero la nota es todavía solo un borrador. El retraso ha sido conveniente para los constructores; si la nota hubiera sido publicada, la obtención de los permisos para proyectos como Ffos-y-fran habría sido más difícil. El borrador propone una zona de separación de 350 metros entre los trabajos a cielo abierto y las casa más cercanas. (21). También insiste que se debe publicar un informe de impacto sobre la salud. Investigadores de la Universidad de Cardiff se ofrecieron por dos veces para conducir un informe del proyecto de Ffos-y-fran, pero la administración local lo desestimó bajo el argumento de que “no había un requerimiento obligatorio” (2). “Se nos han negado las protecciones que la nota técnica de aviso nos habría dado,” me contó Leon Stanfield. “No debería tomarse ninguna decisión hasta que fuera publicada”. Sospecha que la nota ha sido retrasada deliberadamente para dejar pasar Ffos-y-fran y otros proyectos. Cuando pregunté al gobierno galés, un portavoz lo negó. Mantuvo que la asamblea está esperando los resultados de “más investigaciones que miren de forma más cercana la relación geográfica ente los recursos de carbón en Gales y las comunidades de galés.” (23)

Este no es el único asunto que los contrarios al proyecto encuentran raro. El concejo vecinal ofreció un trato especial a Millar Argent. Permitirían a la compañía recuperar los costes de sacar su caso de los beneficios en la investigación pública – 800.000 libras- que pagaría al concejo por el carbón (24). La gente de Merthyr, en efecto, pagó a los abogados de los empresarios para que pleitearan contra ellos. No hubo tal apoyo para los contrarios: Tuvieron que financiar su caso en la investigación con su propio dinero. Perdieron. Después de una victoria temporal de los activistas en la Corte de justicia, la excavación comenzó hace unas semanas.

Los habitantes comienzan a sospechar que la compañía minera, Millar Argent, tenía amigos en lugares privilegiados, así tienen libertad para obtener información. Los resultaron les asombraron. Primero, recibieron una carta enviada en junio de 2004 por Stephen Timms, entonces ministro de energía en el gobierno de Westminster, al primer ministro de Gales, Rhodri Morgn (25). “mis funcionarios,“ Timms revelaba, “habían tenido un contacto regular con Millar Argent”. Quería que la solicitud e la compañía “resuelta con el mínimo de retraso”. Entre las ventajas que listó estaba que la mina ayudaría a mantener la central energética de Barry funcionando: Si sabían que tenía suministro seguro de Ffos-y-fran, la compañía energética fijaría los filtros de azufre par cumplir con los reglas europeas, que permitirían que la planta permanecería abierta más tiempo. Esto, a cambio, “aseguraría el futuro” de la industria a cielo abierto galesa. La carta es extraordinario en tres aspectos. Primero, el ministro de un departamento responsable de recortar las emisiones de carbono (el de comercio e industria) debe estar apoyando un proyecto de mina de carbón al aire libre en nombre de su constructor. Segundo, que debe estar buscando extender la vida de una de plantas más ineficientes de carbón en el Reino Unido (Aberthau ha estado funcionando desde 1971). Tercero, Aberthwau usa carbón de diferentes fuentes (50% de él es importado) y es difícil comprender porque esta supervivencia debe ser dependiente de Ffos—fran. Pero este no fue el final de las presiones. En diciembre del 2004, el sucesor de Timms, Mike O’Brien, envió a Rhodri Morgan una segunda carta (26). Repitió los ruegos que Timms hizo en nombre de Millar Argent. También usó un nuevo argumento. Sin el proyecto de Ffos-yfran, Aberthaus no podría permanecer abierto, porque su capacidad de traer carbón de fuera esta “restringida por límites en la capacidad de los puertos y el ferrocarril”.

Unos pocos días después de leer esta carta, encontré un documento publicado por el departamento de Mike O’Brien al principio del mismo. Contenía la siguiente declaración:” Padecimos problemas en el año 2000 cuando la demanda de carbón importado se incrementó sustancialmente…Esto ha sido superado sin problemas por la inversión en nuevos suministros rodantes y alguna mejora en los enlaces por tren--- EWS y Freifhtliner Heavy Hayl han invertido enormemente en nuevo suministro rodante y parece ser suficiente capacidad para mover el tonelaje de carbón proyectado.” (27)Respecto a las restricciones portuarias que podrían prevenir las importaciones de carbón, el documento revela que “hay un extra de capacidad en la costa Oeste”- que incluye Gales (28). Me parece que O’brien ha usado información falsa buscando persuadir a Rhodri Morgan para que apruebe el proyecto. Cuando le reté, un portavoz del gobierno designado para contestarme me dijo que “la carta se refería a información que teníamos en ese momento. No hay argumento para decir que Mike O’Brien estaba engañando al ministro.” (29)

Al final del 2006, el gobierno de Blair estableció un cuerpo llamado Coal Forum, compuesto de productores de carbón, compañías eléctricas y ministros y funcionarios del gobierno, cuyo propósito era presionar por el futuro del carbón (32). Las compañías que operan a cielo abierto usaron el foro para quejarse de las leyes de planificación que permitirían a los habitantes locales retrasar sus proyectos y pedir una aprobación de los procesos más rápida (33). Pidieron al gobierno una declaración que explicará los beneficios de la diversidad de fuentes de energía, para prevenir las políticas sobre el clima que favorecen al gas (34). Esperaban que esto apareciera en el Libro Blanco de la Energía (35,36). Han recibido todo lo que querían. Sabemos que el partido laborista tiene una relación desde hace tiempo con los mineros del carbón y sus sindicatos. Pero, mientras el Nuevo Laborismo ha mantenido su apoyo por la industria, su dedicación parece haber cambiado de los trabajadores a los jefes. Para ver lo que vendrá a Merthry Tydfil, visité el proyecto a cielo abierto de Selar en el Neath Valley. No es tan grande como el de Ffos-y-fran, pero es difícil discernir el tamaño del agujero. Desde el borde del pozo, un camión enorme en el otro lado se reducía a un punto amarillo. A pesar de esta anchura no podía ver el fondo. Las carreteras zigzagueaban hacia abajo en pendientes irregulares durante cientos de metros hasta que desaparece debajo del acantilado en el que permanecía. Incluso desde lo alto de Mynydd Pen-Y-Cae, 1500 pies por encima del borde del agujero, la mina dominaba la vista. Acampe en la montaña y observé las luces que subían y bajaban del pozo mucho después de oscurecer. Cuando piensas en la gente que protesta tontamente por unas pocas de turbinas eólicas, la negación de este asunto parece incomprensible. Espero que esto cambié. Espero que una nueva movilización, apoyando a la población de Merthyr Tydfil y otras comunidades afectadas pararán el intento del gobierno de devolvernos a la edad del carbón.

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