adn.es
04/08/09
La comunidad científica sólo conoce unos 5.000 de los hasta un millón de objetos celestes, de entre 100 y 200 metros de diámetro, que podrían colisionar con la Tierra, por lo que la necesidad de su estudio "debería ser una actuación prioritaria" para el conjunto de los países.
...Siga leyendo, haciendo click en el título...
Así lo entiende el profesor de Física, Ingeniería de Sistemas y Teoría de la Señal de la Universidad de Alicante, Adriano Campo, quien aboga por "intentar sensibilizar a las administraciones sobre este problema" que, aunque parece "potencial o improbable, es real".
De los objetos grandes que orbitan cerca de la Tierra, aquellos que tienen más de un kilómetro de diámetro y cuyas consecuencias ante un hipotético impacto serían catastróficas, "conocemos el 80 por ciento".
Sin embargo, "el problema son los relativamente pequeños, los de 100 ó 200 metros de diámetro, que pueden haber entre cien mil a un millón de objetos, y de los que sólo conocemos unos 5.000".
En este sentido, ha recordado que el cuerpo celeste que cayó en la región de Tunguska en 1908 tenía un diámetro cercano a los 100 metros y asoló "unos 2.000 kilómetros cuadrados de selva siberiana.
"Existe un riesgo potencial, de ahí que es importante convencer a las administraciones que deben impulsar programas para intentar descubrirlos y observar sus órbitas", ha manifestado Campo, quien ha participado en los Cursos de Verano del Campus de Alcoy (Alicante).
En este sentido, ha subrayado la necesidad de coordinar este trabajo con la Agencia Espacial Europea, así como con los observatorios y los institutos de investigación.
Los cráteres, algunos de ellos con una antigüedad de 10.000 o 50.000 años, "reflejan que ya ha ocurrido, luego puede volver a ocurrir".
"Por ello, es necesario descubrir posibles objetos de riesgo y crear una estrategia común" para minimizar posibles impactos", ha manifestado Campo, quien considera que "existen capacidades técnicas para prevenir este tipo de colisiones cósmicas".
"Cuantas más orbitas conozcamos más probabilidades tendremos de calcular posibilidades de colisión y, en un caso desafortunado, tener suficiente tiempo para poder plantear alguna estrategia para mitigar el riesgo", ha precisado.
Pero ¿qué estrategia es la mejor?, se ha preguntado.
"La idea de destruir el objeto con un dispositivo nuclear que puede impactar no parece la opción mas sensata" por el riesgo, según expone el investigador, de que no se logre al cien por cien y por la posible lluvia de material contaminado que caiga sobre la Tierra.
A su juicio, "es más sensato desviarlo de la órbita cuando aún esté lejos".
Por ello, la Agencia Espacial Europea (ESA) mantiene abierto el proyecto "Don Quijote", cuya finalidad es investigar cómo se podría desviar un asteroide que se dirigiera a la Tierra.
La idea es enviar dos naves, "Sancho" e "Hidalgo", la primera para conocer todos los datos posibles del asteroide (masa, campo gravitatorio y composición interna) y la segunda para impactar contra el asteroide para tratar de desviarlo.
martes, 4 de agosto de 2009
Sólo se conoce mínimo porcentaje asteroides que podrían impactar con Tierra
Etiquetas: sucesos cósmicos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario